Orientación acerca de la evaluación
La evaluación será formativa, continua, individualizada y global.
La observación directa y sistemática constituirá la técnica principal del proceso de evaluación.
Será formativa puesto que sirve para identificar los aprendizajes adquiridos, permite establecer el ritmo y características de la evolución de cada niño/a, posibilitando la adopción de medidas de apoyo, así como de adaptación y enriquecimiento curriculares para todo el alumnado que lo necesite.
Será continua en cuanto a que estará inmersa en el proceso de enseñanza y aprendizaje de los niños/as, e integrada en el quehacer diario del aula.
Será individualizada, atendiendo a las características de cada uno de los/as alumnos/as y entendida como una ayuda para progresar en su desarrollo personal y social.
Será global en cuanto que, además de tener como referente fundamental los criterios de evaluación de cada área y/o materia, tendrá en cuenta la consecución de los objetivos generales de la etapa. De esta manera se da respuesta al marco curricular, en torno a las competencias básicas.
La evaluación será compartida y consensuada por todo el profesorado que tenga relación directa con cada grupo/clase. Además de la evaluación del alumnado, siguiendo los criterios y técnicas de evaluación establecidas, se evaluará tanto la labor del profesorado como el proceso de enseñanza-aprendizaje.
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